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TOMi 7 como herramienta de mediación pedagógica

En la actualidad, las TIC se han convertido en un referente para la renovación de las prácticas educativas y la mediación del aprendizaje, motivo por el cual su presencia en las aulas de clase, va en aumento.

No obstante, como lo plantea la Unesco (2013) la lógica de incorporación de TIC a las aulas de clase se ha venido desarrollando bajo el esquema de “importación”, es decir, se han ido introduciendo en las escuelas tecnologías, sin claridad previa acerca de cuáles son los objetivos pedagógicos que se persiguen con estas, así como sus alcances y limitaciones de acuerdo al contexto y público que impacta.

A esto se suman los cambios vertiginosos de las sociedad contemporánea que exigen una constante renovación pedagógica y que ponen en cuestión qué es lo que deben enseñar en el siglo XXI. En respuesta a este desfase de expectativas, respecto a lo que representan las TIC en los escenarios educativos y los resultados que se vienen obteniendo, se presenta  TOMi 7 como tecnología, diseñada para satisfacer de manera integral las necesidades de las escuelas en materia de TIC, ofreciendo soluciones didácticas que permiten mediar los diferentes momentos de clase de forma pertinente y contextualizada, respondiendo a las necesidades e intereses de los maestros.

En consonancia con lo anterior, se presentan algunas ventajas de TOMi 7 como solución educativa para los espacios de enseñanza-aprendizaje:

  • Fortalece el trabajo colaborativo en el aula. Maestros y estudiantes podrán sumar esfuerzos, talentos y competencias para alcanzar los objetivos de enseñanza.
  • Motiva la participación. Los estudiantes estarán inmersos en ambientes de aprendizaje más dinámicos y atractivos que pueden influir en su comportamiento, incrementar su motivación y favorecer su participación.
  • Fomenta la creatividad y la innovación educativa en el aula. El maestro podrá   transformar las prácticas educativas habituales y crear diversos contextos de aprendizaje para las relaciones docente, estudiante y contenido.
  • Facilita la representación de información de manera dinámica y atractiva. El maestro tendrá novedosas herramientas para la presentación e intercambio de información, proporcionando a los estudiantes nuevas alternativas para acercarse al conocimiento.
  • Fortalece el desarrollo de competencias del siglo XXI. El maestro puede diseñar estrategias de enseñanza-aprendizaje que motiven a los estudiantes a pensar y seguir aprendiendo autónomamente, aplicando los aprendizajes adquiridos en contextos y desafíos de la vida cotidiana.
  • Fortalece el aprendizaje autorregulado. Los estudiantes serán copartícipes de su proceso de aprendizaje.
  • Facilita la labor del maestro. Los maestros podrán afrontar de manera fácil y rápida las actividades propias de su quehacer pedagógico.

Conoce cómo funciona en el siguiente video 

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